Hoy me levante y recordé tu nombre
con tristeza y soledad.
Viajé con mis ojos
tras las cortinas de mi habitación
mi piel se lleno de recuerdos y silencios.
Vi tus ojos distantes y sombríos
y un suspiro me arranco el alma.
Caí en llanto sobre mi cama revuelta
dormí abrazando tus caricias.